Es verdad que son unos rivales que están muy cerca de nosotros en cuanto a puntos, pero no tenemos que olvidar que estamos por encima de ellos.
Todo esto viene derivado de la buena temporada que estamos haciendo pese a la última racha que hemos podido puntuar un poco menos.
Al final, el objetivo que tiene el vestuario son las ganas de seguir compitiendo, sobre todo este domingo en Caspe, con nuestra afición, intentar sacar los tres puntos contra el Calamocha y a ver los tres últimos partidos de liga con otra manera diferente.
La presión que nos ponemos nosotros es la de personas que nos gusta competir, somos personas que nos gusta demostrar el cariño que la afición, la directiva, el cuerpo técnico nos da a nosotros, nos sentimos en deuda con ellos y al final, la única presión que nos podemos poner, es demostrar las cosas que se nos demuestran a nosotros.
Seguimos trabajando todos en la misma línea, con lo que dice el entrenador, que creemos en lo que dice y seguir trabajando para el fin de semana que viene, en casa.